Reflexiones de Esther Perel
Durante la reciente Cumbre Humana, organizada por el fondo de inversión y incubadora de startups, Human Ventures, Esther Perel ofreció una profunda visión sobre el impacto de las relaciones humanas en el futuro del trabajo. Perel, quien recientemente se unió a Human Ventures como asesora y «filósofa de relaciones», enfatiza que las compañías no pueden ignorar este impacto si desean tener una fuerza laboral feliz, productiva y exitosa.
Aquí algunos puntos clave de la charla de Perel:
1) Las relaciones son el nuevo eje central.
Perel explica que todos tienen una historia de relaciones que llevan consigo siempre, incluso al trabajo. Esta historia define cómo pedimos ayuda, confiamos en otros o admitimos errores. Reconocer que llevamos esta historia al trabajo nos permite enfrentar conflictos desde un lugar de conciencia. Perel también señala que los conflictos en las relaciones suelen girar en torno a tres cosas: poder y control, cercanía y confianza, y valor y reconocimiento.
2) El lugar de trabajo debe alinearse con tu propósito y sentido de identidad.
El trabajo se ha convertido en un lugar principal donde las personas buscan experimentar identidad, pertenencia, propósito y crecimiento. Si los empleados no encuentran estos valores, no permanecerán en la empresa. Esto se hizo especialmente evidente durante la pandemia. La necesidad de propósito en el trabajo podría estar detrás del fenómeno conocido como la Gran Renuncia, en el que muchas personas han dejado sus empleos durante la pandemia.
3) Los trabajadores que juegan juntos prosperan juntos.
Según Perel, la diferencia entre relaciones que sobreviven y las que florecen radica en la diversión. La diversión rompe barreras entre las personas, fomentando un mejor trabajo en equipo y potenciando la creatividad. Perel cree tan firmemente en el poder del juego que creó un juego, «Where Should We Begin – A Game of Stories», destinado a fomentar la diversión y la conexión en reuniones laborales o cenas.
Estas reflexiones no solo son relevantes para el ámbito laboral, sino también en nuestra vida cotidiana, especialmente en estos tiempos donde la conexión humana es más esencial que nunca.